
Esta fuente es un nacimiento natural que tiene seis caños.
El clima de Cúllar es de tipo Mediterráneo Continental, derivando hacia Mediterráneo de Montaña en las zonas altas de serranía; es un clima de veranos secos y no excesivamente calurosos dada la altitud del municipio (entre 24-26 ºC de temperatura media) y un invierno frío (4-6ºC). La amplitud térmica diurna o extremos de temperaturas es alta. Las precipitaciones o lluvias rondan los 350-400 mm anuales en la mayor parte del municipio, si bien son generalmente crecientes con la altitud hasta los 550-600 mm registrables en zonas de montaña como la Sierra de Orce. La primavera y sobre todo el otoño concentran la mayor parte de las precipitaciones anuales y son estaciones moderadamente templadas. Los fenómenos de nieve y hielo son frecuentes sobre todo a finales del invierno con una media de 8-10 días de nieve en zonas serranas del municipio como las Sierra de Periate y Orce, hecho meteorológico que propicia magníficas cuencas visuales paisajísticas de gran contraste y calidad. | |
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Según el historiador local J. Castillo, las fiestas de Cúllar más antiguamente documentadas son la festividad de San Sebastián, hoy desaparecida, y la festividad de la Virgen de la
Cabeza.
Ambas son representaciones de textos de moros y cristianos de gran raigambre en la zona norte de Granada y otras áreas andaluzas.
Hacia el 20 de Enero se celebraba la festividad de San Sebastián, o los papeles viejos, en las Eras de las Fiestas.
Esta fiesta se origina en el S.XVIII y duró hasta 1.934-35, cuando la muerte accidental de un participante y el desinterés por el culto interrumpieron la celebración.
El término municipal tiene 413,78 Km2 y unos 5.600 habitantes.
Cúllar cuenta con numerosos anejos: El Margen, El Sauco, Las Vertientes, Matián, Pozo Iglesias, Pulpite, Venta del Peral, Venta Quemada, Tarifa, Malagon, Barrinuevo. La granja. Orgalla.
El nombre, Cúllar, proviene de la palabra "Qúllar", que significa "Terreno elevado". En 1787 se conocía como "Cullar de Baza" (sin tilde). Posteriormente, en 1842 se denominaba "Cullar" (también sin tilde). En 1860 el nombre era "Cúllar de Baza". Entre 1897-1900 pasó de llamarse "Cúllar de Baza" a "Cúllar-Baza". Y, finalmente, por el momento, en 1986 cambió su nombre a "Cúllar"
PrehistoriaEn el término municipal de Cúllar se encuentran dos importantes yacimientos arqueológicos prehistóricos. El denominado Cúllar-Baza I es posterior a los de Venta Micena en Orce y pertenece a los primeros asentamientos humanos detectados en nuestra provincia. En aquellos tiempos (hace unos 800,000 años) Cúllar se encontraba en una zona lacustre. El otro yacimiento al que nos referimos es el de Malagón, declarado Bien de interés cultural. Es un poblado de la cultura de Los Millares, en el bronce antiguo o calcolítico. De entre los materiales obtenidos del yacimiento destaca un ídolo masculino que se encuentra en el Museo arqueológico de la provinciaAntigüedadEdad MediaEn 1484 fue conquistada por los Reyes Católicos, aunque posteriormente una incursión de El Zagal la destruyó e incendió. Edad ModernaDebido a su apoyo a la sublevación morisca Cúllar sufre la represión y pierde una gran parte de su población. En 1620 Cúllar consiguió la municipalidad. Hasta entonces pertenecía al municipio de Baza Actualidad |
El yacimiento arqueológico de El Malagón se sitúa en el altiplano de Chirivel, sobre una suave elevación en el término municipal de Cúllar de Baza (provincia de Granada, España). Se trata de un poblado de la Edad del Cobre, perteneciente a la Cultura de los Millares fechable entre el 2.565 y el 2.200 antes de Cristo.
El poblado está compuesto por varias cabañas de planta circular hechas de zócalos de piedra, trabados con barro, sobre los que se alzan muros de tapial. En el interior de algunas viviendas existen bancos corridos y hogares delimitados por anillos de adobe. El poblado se protegió por una muralla y un fortín circular situado en la cima de la colina. Por el material aparecido en el yacimiento se trata de un poblado cuya principal actividad económica era la metalurgia del cobre.
El enclave del poblado de El Malagón adquiere un alto valor estratégico si se tiene en cuenta que no sólo controla los recursos mineros, sino que está situado en un cruce de caminos donde se ponen en contacto las rutas más importantes que unen la costa mediterránea con el Alto Guadalquivir.
El área excavada en las sucesivas campañas ha mostrado la existencia de un conjunto de cabañas de diferentes dimensiones, quedando así mismo documentada una potente línea de muralla que bordea el extremo norte del poblado. La distribución general de las cabañas dentro del poblado pone de manifiesto un sistema primitivo de organización urbanística basado en viviendas circulares aisladas, aunque agrupadas en determinadas zonas y dejando pequeños sectores como espacios libres, hacia los cuales se orientan, por lo general, las puertas de las cabañas.
Es también característica de este poblado la existencia de numerosas fosas de diversos tamaños y de planta circular o irregular que se encuentran en su mayoría al exterior de las cabañas, que se utilizaron, probablemente, como vertederos. Cerrando el área de habitación por el lado norte, aparece una línea de fortificación que discurre en sentido este-oeste.
La muralla está formada por piedras de regular tamaño, trabadas con un tipo de barro similar al que se empleó como mortero en los muros de las viviendas. La cara interior se mantuvo sin modificaciones a lo largo de toda la vida del poblado, mientras que hacia el exterior se realizaron diversas reconstrucciones.
Finalmente, hay que señalar como obra de defensa del hábitat la existencia de un pequeño fortín de planta aproximadamente circular, muy destruido, que se halla emplazado sobre la cima del cerro inmediato al poblado.